autor : López Campillo 24 jun 2013

La llamada "Línea del Agüera" es el  sistema defensivo que el mando republicano plantea en las cumbres de la margen izquierda del Agüera, en un intento de contener el avance del llamado bando nacional. Estamos hablando de una línea de al menos 14 kms con trincheras, parapetos, pozos de tirador, nidos de ametralladora, refugios y un fortín, extendidos hasta la cima del Betayo, frente a Biroleo y Castro Alén, elevaciones en manos del enemigo en julio de 1937.
El Fortín de Sámano se planta en una elevación clave dentro del sistema defensivo del Agüera, el acceso por carretera al valle de Guriezo desde el puerto de La Granja. Es una trinchera excavada en roca de 30 metros de largo y puesta a cubierto con una estructura de hormigón armado. Presenta dos troneras para ametralladora y 20 para fusil, con dos huecos frente a las troneras de ametralladora que facilitarían el paso y serían usados como almacén de municiones. El fortín quedaba debidamente camuflado y protegido bajo una capa de tierra y probablemente lonas, redes y ramajes.



La línea de contención del Agüera no llegó a entrar en batalla, tan sólo los atrincheramientos situados más al sur. El contingente vasco destinado a su defensa se replegó en agosto de 1937 a la siguiente línea fortificada, la del Asón. Días después las tropas vascas (alrededor de 12.000 hombres) se entregaron en las poblaciones de la desembocadura del Asón (Santoña, Colindres, Laredo...).

(datos extraídos de "Fortificaciones de la Guerra Civil en la zona oriental de Cantabria", VV.AA, publicado en Castillos de España. Gracias al historiador José Ángel Hierro Gárate).

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cachos de historia que sin duda merecen ser conocidos, valorados y preservados.

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